— creo que esta planta de veza busca apoyo en las hojas de cebadilla para crecer
— yo creo que se agarra a ella porque es una trepa
— bien, pues analicemos. Es delicada y frágil, no tiene lignina que pueda mantenerla erguida, busca alguien fuerte a su lado
— pero sus zarcillos se retuercen agarrando las hojas de su compañera de suelo con inusitado vigor para subir más que ella
—bueno, sus zarcillos no se retuercen, sino que lanzan sus tiernos tallos hasta encontrar a alguien que se preste ayudarla
— vale, pero no me negarás que la presión a la que somete las hojas de cebadilla puede lastimaras
—piensa, si los zarcillos lastimaran las hojas, la evolución no lo habría permitido, se habría extinguido o habría buscado otro ambiente para crecer lejos del peligro, si eso no ha ocurrido es porque se sienten bien juntas
— ummm, eso no lo entiendo, que beneficio obtiene la cebadilla a cambio de sustentarla?
— amistad y sentirse bien por prestar apoyo a la veza
—creo que no existe el sentimiento de amistad y compañerismo entre las plantas
— entonces, ¿cómo llamas al poder que tiene la veza de fijar nitrógeno del aire en el suelo para hacer este más fértil y que su compañera, la cebadilla, se vea lustrosamente verde?
— ¿sabes lo que creo?, creo que esto de las plantas se te está yendo de las manos y te estás volviendo gilipollas
especie: cebadilla Hordeum murinum, veza Vicia vellosa
recolección: valle de la Cueva, Almadenejos, Ciudad Real
ref: 378
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