14 febrero, 2020

es extraño, nunca siento deseos de que llegue la primavera, cuando los días empiezan a crecer al inicio del invierno es como si se iniciara la pérdida paulatina de la paz interior que me acompaña desde el otoño, siento un inexplicable apego a este paisaje quieto y sereno , soy como la almendra que se mantiene impasible prendida de la corteza mientas que a su alrededor comienza la savia a fluir y las yemas a abrirse

miro la oscuridad que se va perdiendo mientras que ellas miran hacia adelante con las mejillas sonrosadas por la luz

 

especie: almendro asilvestrado Prunus dulcis
recolección: Camino de la Cabeza del Palo, Ciudad Real

 

ref: 1368