

es difícil de explicar pero es frecuente que cuando cojo ciertos elementos, ramas, hojas, o cualquier otro fragmento, sienta que aunque no lo vea inmediatamente, dentro hay una imagen escondida que saldrá en algún momento, he aprendido a ser paciente y esperar ese momento
aunque no todos en casa tienen la misma percepción, sobre todo cuando el manojo de hojas de enea permanecen durante alguna semana en el suelo de la bañera humedeciéndose con las duchas diarias
creo que temen comenzar a oír el sonido de tambores, que aparezcan lianas levantando el suelo, enredaderas trepando por el techo de las que cuelgan monos, rinocerontes pasando a la carrera por el pasillo, tienen miedo de que la casa se convierta en el Jumanji manchego
especie: hojas de enea Typha latifolia y cantos rodados de playa
recolección: ribera del Guadiana en Picón, Ciudad Real y playa de Vidiago en Asturias
ref: 848
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