

la hoja de roble tersa y jugosa de color verde homogéneo y vibrante suspendida de la rama del árbol, se mece junto con otras iguales, hacen la función de la fotosíntesis día tras día, desde el inicio de la primavera hasta el final del otoño
una de esas hojas ha sido elegida por la larva de algún insecto que necesita alimentarse para realizar su función, la metamorfosis, y continuar con su probablemente corta vida, para ello se come el parénquima de la hoja dejando tras de si un delicado encaje
tal vez ha considerado que ya ha comido lo suficiente y antes de su transformación se ha dejado parte del tejido verde intacto o quizá algún colirrojo tizón lo ha considerado un bocado adecuado para cebar a su polluelo
esta hoja cuenta una historia, real o imaginada y contiene la belleza íntima de los procesos de la vida, por eso Pepe la recolectó
especie: hojas deteriorada de roble común o carballo Quercus robur
recolección: ribera del arroyo Novales. Vidiago. Asturias
ref: 1253
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