9 noviembre, 2017

la ceguera de la humanidad producida por un evento atmosférico la convierte en indefensa, unas plantas cuyos extremos superiores están hendidos en tres partes (trífidos) cultivadas por su aceite, se convierten en mutantes y siembran el caos y la destrucción de la sociedad

fue hace dos veranos cuando Pepe releyó aquel libro de su adolescencia, “el día de los trífidos” y de nuevo la imaginación que siempre ha tenido para inventar historias de ciencia ficción, se transformó una especie de culebrón veraniego de nuestras vacaciones

en todos sitios veía la sombra de las malditas plantas devoradoras de hombres, me advertía en los paseos nocturnos que ”ellos” se escondían en la oscuridad, incluso veía en los grandes molinos de viento modernos, los aerogeneradores, enormes trífidos que nos perseguían como a un Don Quijote de la Mancha un poco pasado de copas
tal vez si sintiera una perturbación en la fuerza desenfundaría una espada láser de la Orden Jedi

él es así, mi hombre siempre ha tenido un alto nivel de midiclorianos en sangre

 

especie: cápsula trifida de lirio español Iris Xiphium
recolección: Coma de Ransol. Principado de Andorra

 

ref: 780